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Calentador de agua con caldera de gasoil y motor de bomba eléctrica. También se encuentran disponibles motores de combustión interna y sistemas hidráulicos. O para la toma de fuerza del tractor.
Una hidrolimpiadora de agua caliente es la solución para la suciedad con alto contenido de hidrocarburos, aceites y grasas. El agua caliente suaviza estos compuestos y los hace más solubles en comparación con una hidrolimpiadora de agua fría que simplemente agita.
Este sistema combina agua a alta presión con agua a alta temperatura. Esto le permite limpiar perfectamente grandes áreas. El equipo de limpieza incluye:
2.1. Contenido de hidrocarburos y aceites en los suelos.
2.2. Lugares que requieren desinfección porque el agua caliente a temperatura constante tiene un efecto esterilizante.
Gómez Oviedo ha presentado un sistema patentado que limpia con agua caliente producida por una caldera de combustión.
El sistema Gómez Oviedo mezcla alta presión y agua caliente para limpiar en profundidad grandes superficies.
Los equipos pueden funcionar de forma autónoma, con alimentación de la red de fábrica, o de forma centralizada en instalaciones fijas.
Nuestras hidrolimpiadoras de agua caliente son un equipo comercial. La configuración más frecuente es la de caldera de alta presión con motor eléctrico trifásico y quemador de gasóleo. Una bomba de alta presión envía agua a la caldera y luego la saca por medio de una boquilla.
Una hidrolimpiadora de agua caliente puede elevar la temperatura del agua de aproximadamente 12 °C a 155 °C. Esto reduce la presión de trabajo, el tiempo requerido y el uso de agentes de limpieza. Por lo tanto, la limpieza con agua caliente ofrece ventajas convincentes con una amplia gama de opciones para optimizar la limpieza.
Las grasas y aceites sólidos también se pueden disolver en agua caliente, emulsionar bien y eliminar con facilidad. En el sector alimentario, las proteínas y grasas se pueden suprimir de forma especialmente eficaz gracias al agua caliente.
En muchos casos, la grasa y el alquitrán se pueden eliminar con agua caliente, por lo que puedes reducir en gran medida la cantidad de detergente que utilizas o no es necesario utilizar detergente. Además de ahorrar costes, esto también protege el medio ambiente y los recursos.
Las superficies lavadas con agua caliente se secan rápidamente con calor y quedan inmediatamente disponibles para su posterior procesamiento u otros usos.
Se puede observar una reducción significativa de bacterias después del lavado con agua caliente. Esta reducción de bacterias lograda sin el uso de desinfectantes es suficiente para muchos requisitos de higiene.
El agua caliente afloja la suciedad más rápido, lo que le permite ahorrar mucho tiempo hasta un 35 %. De esta manera se pueden llevar a cabo diversas tareas de limpieza de forma económica y rentable.
Confía en Gómez Oviedo para cualquier adquisición de segunda mano que necesites. ¿A qué estás esperando?