Publicado por Gomez Oviedo el 17 Jun a las 7:01 AM
Antes llevar a cabo cualquier reforma en tu vivienda tienes que solicitar una licencia de obras o presentar una comunicación previa, según corresponda. Desde Gómez Oviedo te explicamos qué diferencias existen entre estos tres documentos, cuándo debes solicitar cada uno y cómo cumplimentarlos. Sigue leyendo para conocer todo sobre los permisos de obra en Asturias, concretamente en el municipio de Oviedo.
Una licencia de obras es un permiso que debes solicitar y entregar a tu ayuntamiento antes de realizar ciertas reformas en tu vivienda. Su objetivo es comprobar que estos cambios se adecúan a la normativa urbanística.
Existen tres tipos de licencia. Estas están detalladas en el Plan General de Ordenación consolidado a diciembre de 2013 del Ayuntamiento de Oviedo. A continuación, te explicamos con qué tipo de reformas se corresponde cada una, con el fin de que puedas identificar fácilmente la que se corresponde con tus necesidades.
Las licencias de obra menor abarcan todas las actuaciones que no modifican la estructura, instalación general, composición o aspecto exterior de los edificios, así como que no correspondan a construcción incluidas en los catálogos de protección.
En las licencias de obra media se incluyen las reformas que no pueden considerarse ni de obra menor ni de obra mayor. Entre ellas se incluyen las realizadas en edificios recogidos dentro de los catálogos de protección que no puedan considerarse de obra mayor, así como las obras de restauración, rehabilitación y conservación que no afecten a los elementos estructurales o instalaciones generales.
La licencia de obra mayor recoge las actuaciones que exigen una tramitación y documentación rigurosas.
Tramitar una licencia de obras es muy sencillo, solo tienes que entrar en la sede electrónica de la página web del Ayuntamiento de Oviedo y adjuntar la documentación pertinente en formato PDF o Word.
Para las licencias de obras mayores y medias hay que rellenar una solicitud de licencia y presentar el DNI o CIF. También debes adjuntar información acerca de la finca en la que realizarás las reformas, un proyecto técnico suscrito por un profesional competente y acompañado de su correspondiente hoja de encargo para la dirección facultativa, así como la documentación exigida según el tipo de obra. Estas licencias te permiten realizar modificaciones en edificios, fachadas, medianeras, patios o azoteas, así como instalar grúas o montacargas de construcción en la vía pública.
Para las licencias de obra menor solo tendrás que adjuntar la solicitud rellenada y el DNI o CIF, además de la identificación de la finca en la que se pretende actuar y la documentación necesaria en función del tipo de intervención. Aquí se incluyen las pequeñas reparaciones, decoraciones, ornatos o cerramientos, es decir, cualquier obra de sencillez técnica y escasa entidad constructiva y económica.
Recuerda que hay ciertas acciones que no requieren de ninguna licencia, sino de una comunicación previa. Entre estos supuestos se encuentran los siguientes:
Para presentar una comunicación previa solo tienes que presentar la solicitud correspondiente junto a tu DNI o CIF.
Para cumplimentar la hoja de solicitud de licencia de obras mayores o medias tienes que aportar tus datos personales y aportar diversos datos acerca de la reforma, tal y como el número de referencia catastral del inmueble en el que se va a realizar, su superficie útil o el presupuesto que tiene asignado, entre otros.
El formulario para obras menores pide los datos del solicitante y del representante, además de que se marque el tipo de actuación que se va a llevar a cabo: sustitución, reparación en fachadas y otros elementos constructivos o sustitución de carpinterías exteriores sin modificar la dimensión de los huecos. Asimismo, hay que aportar fotografías de la zona de actuación, indicar la dirección del lugar en el que se van a realizar, la referencia catastral y la fecha prevista de finalización.
Por último, el impreso de comunicación previa solicita los datos del comunicante y del representante, los datos de la edificación objeto de actuación y el tipo de acción que se va a llevar a cabo, entre las que se encuentran las limpiezas o revisiones exteriores, las reparaciones de canalones, tabiques, carpintería interior o falsos techos, entre otros, al igual que los trabajos de pintura exterior, la tala de árboles y la sustitución de sanitarios, por ejemplo.
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