Publicado por Gomez Oviedo el 26 May a las 8:15 AM
Una ducha exterior de obra es una excelente opción para disfrutar del aire libre y refrescarse en los días calurosos. Además, puede aportar un toque de diseño y funcionalidad a tu jardín o terraza. En este post te explicamos cómo construir una ducha exterior de obra paso a paso, qué materiales necesitas y qué aspectos debes tener en cuenta.
Para construir una ducha exterior de obra necesitas los siguientes materiales:
Para construir una ducha exterior de obra debes seguir los siguientes pasos:
Lo primero que debes hacer es medir el espacio donde vas a colocar la ducha y elegir el tipo de plato que quieres utilizar. Existen diferentes opciones en el mercado, como los platos prefabricados de resina o los platos a medida que se adaptan a cualquier forma y tamaño. También puedes optar por construir tu propio plato con mortero o con bloques de hormigón. Sea cual sea tu elección, debes asegurarte de que el plato tenga una pendiente adecuada hacia el desagüe para evitar acumulaciones de agua y posibles filtraciones.
El siguiente paso es preparar el suelo donde vas a instalar el plato. Debes retirar el revestimiento anterior, como baldosas o azulejos, y nivelar la superficie con una regla y un nivel. Si el suelo no está nivelado, puedes aplicar una capa de mortero autonivelante para corregir las irregularidades. También debes marcar la posición del desagüe y hacer un agujero en el suelo para conectarlo con la tubería de evacuación.
A continuación, debes colocar el plato sobre el suelo y comprobar que encaja correctamente y que tiene la pendiente adecuada. Si has elegido un plato prefabricado, puedes fijarlo con adhesivo o con tornillos, según las indicaciones del fabricante. Si has optado por construir tu propio plato, debes aplicar una capa de mortero sobre el suelo y colocar encima una malla metálica o de fibra de vidrio para reforzar la estructura. Luego, debes extender otra capa de mortero sobre la malla y alisarla con una llana, dando forma al plato y creando la pendiente hacia el desagüe. Debes dejar secar el mortero durante al menos 24 horas antes de continuar.
El último paso es impermeabilizar el plato para evitar filtraciones de agua que puedan dañar la estructura o provocar humedades. Para ello, puedes utilizar diferentes productos, como pinturas impermeabilizantes, membranas asfálticas o láminas impermeables. Debes aplicar el producto elegido sobre toda la superficie del plato, cubriendo también los bordes y las juntas con el desagüe. Debes dejar secar el producto según las instrucciones del fabricante y luego aplicar una segunda capa para reforzar la impermeabilización.
El siguiente paso es levantar las paredes de la ducha con ladrillos o bloques de hormigón. Puedes hacerlo con una sola hilera o con dos, según el grosor que quieras darle. Usa una mezcla de arena, cemento y ceresita para unir los ladrillos y asegúrate de que queden nivelados y alineados. Deja un hueco para la mampara o la cortina, si vas a poner alguna.
Por último, debes revestir las paredes con el material que prefieras: gresite, cerámica, piedra, etc. Aplica el adhesivo correspondiente sobre el ladrillo y coloca las piezas una a una, presionando bien para que se fijen. Rellena las juntas con lechada y deja secar el tiempo indicado por el fabricante.
Debes revestir las paredes de tu ducha exterior de obra con el material que hayas elegido, usando adhesivo o cemento cola. Debes asegurarte de que queden bien selladas e impermeabilizadas.
Para instalar la grifería y el rociador, necesitarás algunas herramientas básicas, como un taladro, un nivel, una llave inglesa, una cinta de teflón y masilla selladora. También te recomendamos que cierres la llave de paso del agua antes de empezar y que cubras el desagüe con un trapo para evitar que caigan restos.
El primer paso es marcar en la pared los puntos donde vas a perforar para fijar los soportes de la grifería y el rociador. Usa el nivel para asegurarte de que queden alineados y a la altura adecuada. Luego, haz los agujeros con el taladro y coloca los tacos y los tornillos.
Conecta las tuberías de agua fría y caliente a la grifería. Para ello, usa la cinta de teflón para sellar las roscas y evita apretar demasiado para no dañarlas. Luego, conecta el rociador a la salida superior de la grifería con una manguera flexible o un tubo rígido.
Aplica masilla selladora alrededor de los soportes de la grifería y el rociador para evitar que se filtre el agua por detrás de la pared. Deja secar según las instrucciones del fabricante y ya podrás disfrutar de tu nueva ducha.
Por último, debes instalar el desagüe en el hueco que dejaste en la base, conectándolo al sistema de evacuación. Debes asegurarte de que quede bien sellado e impermeabilizado.
En GO Rental Store ponemos a disposición de nuestros clientes, una amplia gama de herramientas y maquinaria en alquiler a tu disposición para llevar a cabo todo tipo de trabajos de obra y construcción. Si necesitas cualquiera de los productos en alquiler que ponemos a tu disposición, te invitamos a ver nuestro catálogo y conectar con nuestro equipo profesional para cualquier duda.