Publicado por Gomez Oviedo el 13 Dec a las 4:10 PM
¿Tienes que llevar a cabo un proyecto de demolición? Hacerlo correctamente requiere de seguir diferentes pasos. Desde Gómez Oviedo te explicamos cuáles son para que no pierdas detalle.
Una demolición consiste en la destrucción de un edificio u otras estructuras. Para realizar una demolición se necesitan dos cosas: la primera, un permiso de demolición, que se debe solicitar en el Ayuntamiento del municipio donde se vaya a realizar esta; y la segunda, maquinaria y equipamiento adecuado que garantice la seguridad de los operarios, viandantes y bienes materiales.
Antes de comenzar con la demolición se deben realizar un estudio y proyecto previos, desconectar todas las instalaciones eléctricas y de agua del edificio y llevar a cabo el vallado y la señalización del espacio donde se vaya a trabajar, así como la desinsectación y desratización de la zona. En caso de que fuera necesario, también se deberán colocar andamios en el exterior, al igual que lonas de neopreno que protejan la vía pública.
Los operarios deberán contar con un equipo de protección adecuado, compuesto por gafas, tapones para los oídos, mascarillas, respiradores, etc.
Cabe recordar que las demoliciones deben ser llevadas a cabo por profesionales y que requieren la presencia de personal con conocimientos de primeros auxilios.
Un permiso de demolición es una licencia que autoriza el proceso de derribo de una vivienda o edificación. Este debe solicitarse a una autoridad competente antes de comenzar los trabajos. Lo recomendable es hacerlo unos 3 meses antes de la fecha prevista de demolición.
Para obtener esta licencia se deberá presentar cierta documentación, abonar una tasa y pagar el impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO) correspondiente.
La demolición de un edificio debe realizarse paso a paso, con el fin de garantizar la seguridad. Así, este proceso de puede dividir en cuatro fases:
En esta primera fase se deben realizar las siguientes acciones:
En esta fase de la demolición se derriba la estructura del edificio, es decir, los tabiques, muros y forjados. Existen diferentes formas de hacerlo, manualmente mediante el empleo de martillos rompedores o con maquinaria específica, como la de demolición controlada. Además, dependiendo de la forma de ejecución, se pueden distinguir los siguientes tipos de demoliciones:
En este paso es esencial controlar las emisiones de polvo. Para ello, suele llevarse a cabo un regado permanente de la zona, utilizando cortinas y lienzos que protejan el área y cubriendo con lonas los escombros que se vayan generando.
En el paso número 3 se comienza a reacondicionar la zona para que esté lista en caso de que se quiera construir un nuevo edificio en ella. Algunas de las tareas que se deben llevar a cabo son el relleno de las tierras de la parcela, la limpieza del solar y el desmontaje de las instalaciones auxiliares, el vallado y la señalización que se colocaron para realizar la demolición.
El último paso, pero no por ello menos importante, es la retirada de escombros. Estos deben clasificarse y llevarse a puntos de recogida específicos. Para conocer más acerca de este procedimiento recomendamos consultar el artículo “Medidas de seguridad en la retirada de escombros”.
¿Tienes una empresa especializada en demoliciones y necesitas alquilar maquinaria adecuada a tus trabajos? Cuenta con Gómez Oviedo. Entra en nuestra página web, selecciona la que quieras y elige si quieres recogerla en tienda o que te la llevemos a casa. Si tienes alguna duda no dudes en consultar a nuestro equipo de expertos, te asesoraremos sin compromiso.